Edinson Cavani cortó el maleficio con un triplete y fue clave en el triunfo de Boca ante Belgrano por la Copa de la Liga
El uruguayo no anotaba desde octubre del año pasado y cortó la sequía de una forma inmejorable
e hizo desear, pero llegó. Edinson Cavani debió esperar 594 minutos para cortar la sequía goleadora y lo hizo de una manera especial: un triplete, que sirvió para que Boca revierta el partido ante Belgrano y gane por 3 a 2 en un partido correspondiente a la octava fecha de la Copa de la Liga. Además, sus gritos fueron en 14 minutos y luego de que en la primera etapa el arquero rival le ahogara lo que podría haber sido ser su primer grito.
Se jugaban 25 minutos de la primera etapa y el Pirata ganaba 1 a 0. Boca, obligado a buscar el partido, se adelantó en el campo de juego y empezó a buscar la igualdad. Un centro de Luis Advíncula fue al primer palo, Cavani anticipó a la defensa, cabeceó, pero Nahuel Losada la tapó, un poco con la cara y otro poco con una mano para mandarla al córner. La sonrisa en su rostro fue la manera de demostrar que su sequía continuaba.
Sin embargo, a los 18 de la segunda etapa y cuando el Xeneize estaba en uno de sus mejores momentos en el partido, el árbitro Nazareno Arasa no dudó en cobrar penal en una infracción sobre Cristian Medina, al que tomaron de la camiseta. El uruguayo, de inmediato agarró la pelota, se hizo cargo del disparo y estableció el 1 a 1, cortando la racha negativa que tenía sin marcar.
Festejó el tanto, pero como sabía que Boca debía ganar el partido, agarró la pelota y la llevó hasta el mediocampo. Tan solo 11 minutos más tarde, desplegó toda su jerarquía para marcar el segundo. Gran pase de Lautaro Blanco sobre la izquierda, y diagonal del uruguayo, que cuando recibió se la picó por arriba del arquero con una definición exquisita. El grito de gol se hizo desear, porque en primer lugar el tanto fue anulado por un supuesto offside, pero luego de la revisión del VAR, se revirtió el fallo y quedó claro que el delantero uruguayo estaba habilitado.
Y cuando a un goleador de la magnitud de Cavani se le abre el arco, todo se le hace mucho más fácil y quedó evidenciado con su tercer gol. Luego de algunos fallos defensivos en la salida por parte de Belgrano, Langoni se anticipó, la encontró picando dentro del área, tiró el centro atrás y el 10 definió para marcar el 3 a 1, el tercero en su cuenta personal y otra pelota para su colección, el primer hat trick con la camiseta xeneize. A los 40 minutos, salió reemplazado por Lucas Janson y fue ovacionado por todo el estadio, que lo aplaudió y le gritó al unísono: “Uruguayo! Uruguayo!”.